#MID COMUNICADO 9 – POR UNA REPÚBLICA INTEGRAL Y DEMOCRÁTICA DE TODOS LOS PUEBLOS DEL MUNDO

¡Qué duda cabe que la monarquía española debe desaparecer y ser sustituida por una República! Pero el problema no es únicamente el modelo de estado.

La humanidad no puede seguir con formas de gobierno incompletos, autoritarios y degenerantes. Y mucho menos la sociedad occidental, en la que se miran las demás civilizaciones, a pesar de que la cultura y civilización occidental está anclada en premisas falsas y que impiden la correcta evolución del ser humano, como son el capitalismo y el cristianismo.

Todo ello está suficientemente demostrado en las obras de Germán Martín Castro, Prometeus: La Era de Acuario (2015) y Procesos de Evolución Superior (2019). En ellas no solo está la crítica exhaustiva y profunda al estado de cosas vigente y la explicación de sus causas, sino las soluciones por las que ha de transitar la persona para llegar a evolucionar completamente. De ahí tomamos nuestros análisis y propuestas.

Ni qué decir tiene que las monarquías no tienen razón de ser porque reproducen institucionalmente la alienación, la salvación fuera de uno mismo y la desigualdad radical entre personas, hasta el punto de que los reyes y la nobleza se configuran prácticamente como especies diferentes al humano normal. Incluso en los (pocos) casos en que se ha embridado su estirpe, a fuerza de revoluciones cruentas, como en Inglaterra, siguen siendo una estructura que lastra, interna y externamente, el desarrollo adecuado del pueblo.

¿Cómo entender entonces la monarquía española? Como lo que es, la prolongación ilegítima de la dictadura franquista. La manifestación personificada de la desigualdad, del abuso de poder, del machismo, de la corrupción, de la tiranía eclesiástica y del dominio de la fuerza armada sobre la población. Enmascarada por una campaña de engaño sistemático a la población por los partidos políticos y medios de comunicación. El rey tiene mucho más poder efectivo del que nos quieren hacer creer. Nada se mueve en el gobierno ni en las cortes sin su visto bueno.

Pero no vale cualquier república ni cualquier “democracia”. No valen las repúblicas liberal-capitalistas, no valen las autoritarias, no valen las teocracias camufladas, no valen los capitalismos de estado.

Es necesaria “una nueva forma de vida”, en la que

“Los gobiernos, las instituciones, y, por tanto, los seres humanos, enfoquen su actividad vital primariamente en vivir para progresar y evolucionar como personas humanas, en absoluta igualdad y valoración, con la necesidad y precisión de conseguir medios adecuados de gestión para subsistir.”

(Martín Castro, 2019: Procesos de Evolución Superior, Libro III, Cap. 17)

La estructura del estado debe ser República construida sobre estas bases, expuestas en nuestros manifiestos fundacionales, y extraídas de los textos de Germán Martín Castro:

A- Formación personal, consistente en que la instrucción y la educación llegue a toda persona humana, con nivel mínimo de bachillerato.
B- Unión real y efectiva de todos los movimientos sociales. 
C- Cambio progresivo del sistema socio-político-económico-financiero y dinerario, para que en el mundo pueda algún día haber verdadera justicia, igualdad y solidaridad. 
D- Conseguir lo más pronto posible que todo ser humano tenga asegurado su porvenir, una vida digna y posibilidades de evolucionar según sus capacidades y posibilidades. 
E- Trabajar la forma de ir eliminando la necesidad del dinero para vivir. 
F- Cuidado y apoyo especial y continuo a las personas disminuidas, dependientes, o disociales, es decir a todos aquellos seres que no pueden, no quieren o no saben cómo portarse como personas humanas de verdad.

Todo lo anterior supondrá la necesaria evaluación y consiguiente cambio de las principales premisas que rigen la educación, la sanidad, el concepto del trabajo, las formas de gobierno y la administración y los principios jurídicos y las normas y leyes.

Madrid, 14 de Abril de 2020

UNIÓN INTEGRAL Y DEMOCRÁTICA DE TODOS LOS PUEBLOS – MID